No es fácil realizar una previsión totalmente acertada sin una bola de cristal pero sí es posible vaticinar algunos de los escenarios inmobiliarios más factibles para este 2021. Lo único que sí está claro es que la crisis del coronavirus ha impuesto algunos cambios no sólo en términos económicos sino que también ha modificado prioridades, mutado necesidades y transformado modos de hacer y actuar.
De hecho, el modo de relacionarse con los demás ha experimentado una profunda metamorfosis y todo ello ha incidido directamente en la forma de afrontar la compraventa o alquiler de una vivienda. Un ejemplo: con el Covid-19 se ha detectado un incremento notable de la oferta de locales comerciales urbanos debido a la ola de abandono de inquilinos que, tras el confinamiento y pérdida del trabajo, no han logrado hacer frente al pago de las cuotas.
Lo que parece que está por venir, y teniendo en cuenta que la oferta de viviendas es también alta, es una recuperación económica pero lenta. Como indican numerosos estudios, el sector inmobiliario (y no solo) podría empezar a experimentar un resultado positivo más de cara a finales del tercer trimestre o principios del cuarto. Si bien es cierto que en este aspecto no hay consenso ya que hay quienes posponen esta reanimación económica para el 2022.
Los expertos también apuntan en lo que se refiere a precios, que la posible caída en las viviendas de entre el 0.5 y el 2.5 por ciento podría extenderse hasta julio. Un pequeño descenso que favorecería, por otro lado, la revitalización y estabilización posterior del mercado. Aunque parece que, en este sentido, los pisos nuevos se resentirán en menor medida que las casas de segunda mano en los que se estima una caída de entre el 0.05 y el 1.6% aproximadamente.
También a causa de la pandemia todo el mundo se ha visto obligado a recurrir más a la tecnología lo cual ha dejado su huella en el ámbito inmobiliario. De hecho, son y serán cada vez más las agencias y los dueños que acudan a los servicios online para la venta de sus inmuebles. Así serán siempre más comunes conceptos como el home staging virtual, los tours virtuales inmobiliarios, la realidad aumentada…etc. El alcance es tal que, más allá de la firma electrónica o acciones de notaría online, se llega a hablar del posible empleo de ciber monedas en la realización de la compraventa y alquileres de propiedades. Todo ello sin mencionar el impacto de la robótica en la construcción. ¿Quién o qué construirá las viviendas?
Otro aspecto que este año mostrará con mayor contundencia es la apuesta por la sostenibilidad. Las viviendas contaminarán cada vez menos, ofrecerán mayor eficiencia energética, contarán con más espacios verdes y, en definitiva, ejercerán con firmeza su compromiso con el medioambiente.
En cuanto a los espacios comerciales, el mercado inmobiliario muestra una clara tendencia hacia la apertura y la flexibilidad, fruto de la imposición pandémica. Y es que las oficinas ya no pueden responder a los cánones tradicionales por lo que deberán ofrecer espacios amplios en los que poder mantener una distancia social, adaptables a las condiciones de sus trabajadores y técnicamente provistos de la iluminación, ventilación y distribución espacial adecuada.
Los sistemas y formatos de pago de inmuebles también han experimentado su propia transformación. Y es que, como resultado de una situación sin precedentes, ha sido necesario adaptarse a un entorno complicado. Así, una de las opciones que ha surgido para dar respuesta a las nuevas necesidades es el alquiler con opción a compra. Este acuerdo posee una doble ventaja: el comprador puede evitar el pago inicial de una hipoteca y disponer de acceso directo a la vivienda y el vendedor saca partido al inmueble sin renunciar a una futura venta y sigue obteniendo ventajas fiscales. Sin duda, una alternativa que irá ganando terreno a lo largo de este año.
Y aunque habrá que dejar que pase el tiempo para confirmar el asentamiento de todas estas tendencias, lo que no habrá que esperar a ver es una oferta de viviendas de primera y segunda mano, de calidad y capaz de adaptarse a sus gustos y bolsillos. En Inmobiliaria Roberto Beloki: menos preocupaciones, más soluciones.
Fuente: Renovalia/ Housell/ Nuovit